Desmantelan en Italia una de las mayores fábricas ilegales de cigarrillos en Europa

Desmantelamiento de una de las mayores fábricas ilegales de cigarrillos en Europa

La Oficina del Fiscal Público Europeo (EPPO) ha llevado a cabo una operación significativa en Palermo, Italia, donde la Guardia di Finanza realizó una serie de registros el pasado 22 de julio. Esta acción resultó en el descubrimiento de una de las instalaciones de producción de cigarrillos ilegales más grandes del continente europeo.

Ubicada en Stornara, en la provincia de Foggia, la fábrica tenía la capacidad para producir hasta dos millones de cigarrillos diarios. La valoración estimada del sitio supera los 1.3 millones de euros.

Operación coordinada y hallazgos significativos

Las operaciones se extendieron por las regiones de Apulia y Sicilia, enfocándose en desarticular la red logística que sostenía esta actividad ilícita. Los registros fueron dirigidos por oficiales del Comando Provincial de Palermo, con el apoyo de unidades en Bari y Foggia.

Dentro del complejo industrial, que abarca 3,000 m², se encontraron 45 palets de cigarrillos con un peso total aproximado de 13 toneladas, así como 165 bolsas de tabaco picado y 134 palets de materiales precursores, incluyendo empaques con logotipos falsificados de marcas reconocidas.

Dentro del lugar también se hallaron diez personas de nacionalidad búlgara y ucraniana viviendo en condiciones precarias. Se sospecha que estaban involucradas en la producción ilegal y posesión de productos de tabaco contrabandeados, así como en la falsificación de marcas.

Afectaciones económicas y contexto investigativo

Material adicional vinculado a la misma red criminal fue confiscado en otro sitio ubicado en Andria. Este descubrimiento es el resultado de meses de trabajo investigativo que se inició tras la incautación de cigarrillos contrabandeados en Palermo. Gracias a un riguroso seguimiento, los investigadores lograron rastrear la cadena de suministro e identificar los lugares de producción, a pesar de las sofisticadas medidas utilizadas por los sospechosos para evadir la vigilancia.

Si los productos confiscados hubieran llegado al mercado, se estima que el fraude fiscal habría causado pérdidas superiores a 3.2 millones de euros a los presupuestos nacional y europeo. La fábrica ilegal podría haber generado ganancias ilícitas cercanas a 350,000 euros diarios, lo que representaría más de 120 millones anuales, con un daño estimado a las finanzas públicas alrededor de 80 millones.

Todas las personas implicadas son consideradas inocentes hasta que se demuestre su culpabilidad ante los tribunales competentes italianos.

La EPPO actúa como oficina pública independiente dentro de la Unión Europea, encargándose de investigar y procesar delitos contra los intereses financieros del bloque comunitario.

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