Nos remontamos a marzo de 2015, cuando Esther “N” acudió a las autoridades de Ciudad de México para avisar que había encontrado muerta a su hija, con síndrome de Down, en el interior de su domicilio en la alcaldía Miguel Hidalgo de la capital mexicana.
Pese a que en un primer momento la historia de la mujer resultó convincente, tal y como señalan medios locales, la investigación de las autoridades determinó que la niña de solo siete años de edad presentaba "indicios de abandono, maltrato y descuido".
El pasado jueves, cinco años después del crimen y gracias a una apelación por parte de las autoridades, se ordenó el arresto de la mujer, por lo que agentes de la Policía de Investigación (PDI) la detuvieron por su presunta participación en el asesinato de su hija menor edad.
Por otro lado, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México señaló en un comunicado que la sospechosa ya ha sido trasladada a prisión en lo que un juez resuelve su situación penal.