Gaza enfrenta una crisis humanitaria devastadora, descrita como un entorno post apocalíptico donde los niños mueren de hambre en silencio. El comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, alerta sobre el colapso del sistema humanitario, con trabajadores y población sufriendo desnutrición extrema. La situación se agrava con testimonios desgarradores de madres que ven a sus hijos llorar por hambre y luchan por obtener alimentos y medicinas en medio de un bloqueo. Desde el inicio del conflicto el 7 de octubre de 2023, se estima que alrededor de 1,500 gazatíes han muerto mientras buscaban comida. A pesar de algunos esfuerzos internacionales para proporcionar ayuda, la hambruna amenaza a más de 2 millones de palestinos en Gaza.
La situación en Gaza se ha vuelto insostenible, con los trabajadores humanitarios y el personal médico enfrentando la misma escasez de alimentos que sufre la población. Philippe Lazzarini, comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), ha alertado sobre el colapso del sistema humanitario en la región. “Cuando quienes cuidan comienzan a desmayarse es porque toda la estructura humanitaria se está derrumbando”, advirtió.
Lazzarini describió Gaza como un “entorno post apocalíptico”, donde los niños mueren en silencio debido al hambre. Muchos pequeños piensan que sería mejor morir, ya que “en el cielo o el infierno podría haber comida, mientras que en Gaza no la hay”. Este sombrío panorama refleja una realidad devastadora: “Los gazatíes son cadáveres que caminan”, añadió.
La desesperación es palpable entre los ciudadanos de Gaza. Manar, una trabajadora de UNRWA, compartió su experiencia diaria marcada por el hambre y el miedo. “Todos los días me despierto sin saber qué va a pasar”, confesó. La inseguridad se ha convertido en parte de su vida tras ser desplazada de su hogar. El temor constante a nuevos bombardeos y a perder seres queridos es una carga emocional difícil de soportar.
A pesar de continuar con su labor humanitaria, Manar enfrenta escasez extrema de agua potable y alimentos. “Voy a trabajar, pero mi corazón está con mis hijos”, expresó, resaltando que incluso las necesidades más básicas son un lujo en este contexto. Muchas familias se ven obligadas a acostarse con el estómago vacío, mientras sus hijos lloran por comida.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó que desde mayo han muerto aproximadamente 1500 gazatíes mientras intentaban conseguir alimentos. La guerra iniciada el 7 de octubre ha dejado a 2,1 millones de palestinos asediados en Gaza.
A pesar de algunos esfuerzos recientes para aliviar el control israelí bajo presión internacional, las agencias humanitarias advierten sobre el inminente riesgo de hambruna. Aunque Israel ha permitido ciertos lanzamientos aéreos de suministros vitales, muchos expertos consideran estas operaciones ineficaces y abogan por un acceso terrestre más directo.
En medio del caos, videos recientes mostraron a rehenes israelíes desnutridos y debilitados, lo que provocó una conmoción mundial y renovados llamados para facilitar la entrada de ayuda humanitaria a Gaza. Hamas ha declarado que permitirá el acceso del Comité Internacional de la Cruz Roja solo si se establecen corredores humanitarios permanentes hacia la región.
Las voces del Alto Comisionado para los Derechos Humanos y otros organismos internacionales han exigido la liberación inmediata de los rehenes y un flujo irrestricto de asistencia humanitaria hacia Gaza, subrayando la urgencia de abordar esta crisis humanitaria sin precedentes.
Cifra | Descripción |
---|---|
1500 | Gazatíes muertos mientras buscaban comida desde mayo. |
2,1 millones | Palestinos asediados en Gaza desde el inicio de la guerra el 7 de octubre de 2023. |
6000 | Camiones cargados con ayuda varados fuera de Gaza. |
El comisionado general de UNRWA, Philippe Lazzarini, afirma que la situación en Gaza es crítica, describiéndola como un "entorno post apocalíptico" donde los niños mueren de hambre y el personal humanitario también sufre escasez alimentaria.
Los trabajadores humanitarios han indicado que la vida diaria en Gaza está marcada por el desplazamiento, el hambre y el miedo constante a nuevos bombardeos. Manar, una trabajadora de UNRWA, expresó que muchos gazatíes se ven obligados a dormir con hambre y que hasta lo más básico se ha vuelto un lujo.
Desde mayo, se ha reportado que aproximadamente 1500 gazatíes han muerto mientras intentaban buscar alimentos.
A pesar de que Israel ha comenzado a permitir algunos lanzamientos aéreos de suministros vitales bajo presión internacional, muchas agencias y ONG consideran estas operaciones ineficaces y abogan por la entrega de ayuda por carretera.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la crisis humanitaria, pidiendo un flujo irrestricto de ayuda humanitaria a gran escala hacia Gaza. Además, las imágenes de rehenes israelíes hambrientos han generado conmoción mundial y llamados a permitir el acceso a suministros vitales.