La Policia de la Generalitat-Mossos d’Esquadra, en colaboración con la Policía Nacional, ha logrado resolver el caso de la muerte violenta de un hombre que desapareció en Reus (Baix Camp) el 6 de septiembre de 2004. Este avance se produce a tan solo tres meses de que el caso hubiera prescrito, y ha llevado a la detención de una mujer, así como a la identificación de un segundo implicado, quien falleció por causas naturales en 2022.
La investigación comenzó en septiembre de 2004, cuando una mujer denunció la desaparición de su hermano. Desde el 3 de septiembre no había tenido noticias suyas, aunque se habían observado indicios que sugerían una salida precipitada de su hogar. Los autores del crimen intentaron simular que se trataba de una ausencia voluntaria al ocultar el vehículo del desaparecido cerca de la estación de tren de Tarragona y realizar llamadas desde sus teléfonos móviles haciéndose pasar por testigos.
En 2021, se localizó el cuerpo de un hombre enterrado en una zona rural de Riudecols, cubierto con una manta y atado con eslingas. A pesar del análisis forense realizado, no fue posible identificar al fallecido ni encontrar coincidencias genéticas en ese momento. Sin embargo, tres años después, la investigación dio un giro significativo cuando la hermana del desaparecido se presentó ante los Mossos d’Esquadra para informar sobre un conocido que había revelado los nombres de los responsables del crimen.
Tras exhumar los restos, se encontraron evidencias claras de criminalidad. No obstante, las muestras disponibles no permitieron identificar al cadáver hasta que en 2024, gracias a la actualización del Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES), se logró obtener el perfil genético necesario para realizar comparaciones.
La coincidencia genética entre los restos encontrados y los familiares llevó a crear un Equipo Conjunto de Investigación (ECI) entre ambas fuerzas policiales. La reactivación del caso fue crucial ya que estaba al borde de la prescripción. Con esta nueva información, se introdujo el perfil genético de la hija del desaparecido en las bases de datos policiales, lo que permitió establecer conexiones entre el desaparecido y los restos hallados.
Las pruebas recopiladas y las declaraciones obtenidas apuntaron hacia la expareja sentimental del hombre y su actual pareja como principales sospechosos. Se reveló que habían engañado a la víctima para llevarlo a un lugar aislado con el objetivo de asesinarlo utilizando un arma blanca y apoderarse así de su negocio. Posteriormente, escondieron su cuerpo en una zona boscosa cercana.
La finca donde residían los sospechosos estaba situada a escasa distancia del lugar donde fueron encontrados los restos. Esto llevó a realizar inspecciones técnicas exhaustivas por parte del equipo especializado desplazado desde Madrid. Las nuevas pruebas forenses confirmaron lesiones compatibles con un ataque con arma blanca.
Finalmente, tras una exhaustiva investigación, se logró esclarecer cómo ocurrió el homicidio y se identificaron a los autores materiales del crimen. La resolución del caso llega justo antes de cumplir dos décadas desde la desaparición y ha resultado en la detención provisional de uno de los implicados mientras se espera juicio.
| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 6 de septiembre de 2004 | Fecha de desaparición |
| 20 años | Tiempo transcurrido hasta la resolución del caso |
| 3 meses | Días antes de la prescripción del caso |
| 700 metros | Distancia entre la finca de los presuntos autores y el lugar donde se encontraron las restas |
El hombre desapareció el 6 de septiembre de 2004, y su caso fue resuelto recientemente por los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional, justo antes de que prescribiera.
La resolución del caso se produjo tras la declaración de la hermana de la víctima, quien proporcionó información sobre los presuntos autores del crimen. Esto llevó a una reactivación de la investigación y a la identificación de los responsables.
Se detuvo a una mujer y se identificó a un segundo autor que había fallecido en 2022. Ambos estaban relacionados con la víctima y habían planeado su asesinato para quedarse con su negocio.
Se encontraron restos óseos enterrados en una zona rústica, que mostraron signos evidentes de criminalidad. Análisis forenses posteriores confirmaron lesiones compatibles con un homicidio.
La detención se produjo tras la reactivación del caso y el hallazgo de coincidencias genéticas entre los restos encontrados y los familiares de la víctima.