La Guardia Civil y la Guarda Nacional Republicana de Portugal han desarticulado la principal organización narcotráfica de la península ibérica, que se dedicaba a botar embarcaciones semirrígidas para el tráfico de drogas. La operación conjunta, denominada "SONDER-RAMPA", resultó en la detención de 32 personas y la incautación de bienes valorados en más de 36 millones de euros, incluyendo 650 kg de cocaína y más de 7 toneladas de hachís. Las investigaciones revelaron que esta estructura criminal operaba desde Portugal para introducir drogas en España, utilizando lanchas rápidas fabricadas ilegalmente. Esta acción es un golpe significativo contra el narcotráfico en la región.
La Guardia Civil, en colaboración con la Guarda Nacional Republicana de Portugal (GNR), ha logrado desmantelar una de las organizaciones criminales más relevantes dedicadas al narcotráfico en la península ibérica. Esta red se especializaba en el lanzamiento al mar de embarcaciones semirrígidas para facilitar el tráfico de drogas hacia España, y el valor total de los bienes confiscados asciende a más de 36 millones de euros.
La presión ejercida por las fuerzas del orden desde el inicio del Plan Especial de Seguridad para el Campo de Gibraltar ha llevado a estas organizaciones a modificar sus métodos operativos. Ahora, han comenzado a trasladar sus actividades hacia la zona del río Guadiana y la frontera con Portugal, aprovechando la complejidad del terreno y los múltiples canales que ofrece esta región.
A partir de 2022, gracias al intercambio de información entre la Guardia Civil y la GNR, se detectó un importante asentamiento logístico de estas organizaciones en territorio portugués. Las investigaciones revelaron que, ante la prohibición en España sobre la fabricación y tenencia de embarcaciones rápidas, se habían establecido fábricas ilegales en Portugal, específicamente en la desembocadura del río Tajo, cerca de Lisboa y Setúbal.
En este contexto, se inició en 2023 la operación conjunta denominada “SONDER-RAMPA”, cuyo objetivo era desarticular estas estructuras logísticas compuestas principalmente por ciudadanos españoles y portugueses. Durante varios meses, las autoridades lograron interceptar seis operaciones significativas relacionadas con la introducción de grandes cantidades de droga en España mediante embarcaciones semirrígidas lanzadas desde Portugal.
La investigación permitió descubrir la magnitud de la organización criminal, que abarcaba provincias españolas como Badajoz, Sevilla, Cádiz y Ceuta, así como ocho distritos en Portugal. Entre noviembre de 2023 y octubre de 2024, se llevaron a cabo numerosas intervenciones exitosas que proporcionaron inteligencia crucial para desmantelar completamente esta red.
Las acciones coordinadas culminaron entre el 7 y el 11 de julio con un golpe decisivo contra la estructura criminal. En territorio portugués, las fuerzas policiales detuvieron a 32 personas, realizaron 32 registros domiciliarios y recuperaron 18 embarcaciones valoradas en aproximadamente 8 millones de euros. Además, se incautaron motores potentes, vehículos y armas.
En España, las autoridades confiscaron 650 kilogramos de cocaína y más de 7.273 kilogramos de resina de cannabis (hachís), además de realizar otras 32 detenciones. Se llevaron a cabo registros en varias provincias donde se recuperaron vehículos robados y armamento diverso.
A través del esfuerzo conjunto entre ambas instituciones policiales, se ha logrado desarticular una organización clave dedicada al narcotráfico en la península ibérica. Este grupo tenía una capacidad operativa notable que les permitía realizar hasta tres lanzamientos nocturnos por día. La operación ha marcado un hito significativo en la lucha contra el narcotráfico en esta región.
Descripción | Cifra |
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Valor total de los bienes intervenidos | 36 millones de euros |
Cantidad de cocaína incautada | 650 kilogramos |
Cantidad de resina de cannabis (hachís) incautada | 7,273 kilogramos |
Número total de detenciones en territorio español | 32 |
Número total de embarcaciones intervenidas | 18 |
La Guardia Civil, en colaboración con la Guarda Nacional Republicana de Portugal, desarticuló una importante organización criminal dedicada al narcotráfico en la península ibérica, interceptando embarcaciones semirrígidas utilizadas para el tráfico de drogas.
El valor total de los bienes intervenidos y del mercado de la droga incautada asciende a más de 36 millones de euros.
Se detuvieron a un total de 32 personas en territorio portugués y se realizaron otras 32 detenciones en España.
Las drogas involucradas incluían cocaína y hachís, con un total de 650 kilogramos de cocaína y 7.273 kilogramos de resina de cannabis (hachís) incautados.
La operación se desarrolló principalmente en las provincias españolas de Badajoz, Sevilla, Cádiz y Ceuta, así como en ocho distritos de Portugal.
Las organizaciones botaban al mar embarcaciones semirrígidas desde el río Tajo en Portugal para llevar a cabo alijos de droga en España, estableciendo fábricas ilegales para estas embarcaciones debido a su prohibición en España.