En Sudán, se están llevando a cabo campañas de vacunación masiva para proteger a decenas de miles de niños ante un brote de sarampión en la región de Darfur. A pesar de los esfuerzos, la situación es crítica debido a que muchos menores nunca han sido vacunados. Desde junio de 2024, se han tratado casi 10,000 casos de sarampión en centros de salud locales, con complicaciones graves y varias muertes. La falta de acceso a vacunas y el conflicto en curso agravan la crisis sanitaria. Se espera vacunar a más de 93,000 niños en las próximas semanas, pero expertos advierten que se necesitan esfuerzos sostenidos para prevenir futuros brotes.
En Sudán, se están llevando a cabo campañas de vacunación masiva para proteger a los niños y niñas ante la creciente amenaza de un brote de sarampión en la región de Darfur. A pesar de estos esfuerzos, la situación en los cuatro estados donde Médicos Sin Fronteras (MSF) opera es alarmante. Muchos menores aún no han recibido ninguna inmunización, lo que hace urgente actuar para salvaguardar sus vidas.
Desde hace un año, los equipos de MSF han estado enfrentando brotes de sarampión en Darfur. Aunque se están implementando campañas de vacunación en varios puntos, es crucial intensificar los esfuerzos para inmunizar a aquellos niños que nunca han sido vacunados. El primer aumento significativo de casos se registró en junio de 2024 en Rokero, una ciudad situada al norte de las montañas Jebel Marra. Desde entonces, se han reportado casos adicionales en otras áreas como Jebel Marra oriental y Forbrenga.
Entre junio de 2024 y mayo de 2025, más de 9.950 pacientes fueron tratados por sarampión en centros gestionados o apoyados por MSF. De esta cifra, aproximadamente 2.700 presentaron complicaciones graves, lo que requirió hospitalización, y lamentablemente se registraron 35 muertes. Para hacer frente al incremento de pacientes, fue necesario ampliar la capacidad hospitalaria pediátrica en tres hospitales.
Una de las principales causas del actual brote es la baja cobertura vacunal en la región. La doctora Sue Bucknell, responsable adjunta del proyecto en Darfur Oeste, señala que “en Forbrenga, el 30% de los pacientes con sarampión tienen más de cinco años y solo el 5% ha sido vacunado”, indicando que la falta de inmunización es un problema persistente desde antes del conflicto actual.
El conflicto armado también ha complicado la respuesta a esta crisis sanitaria. La doctora Cecilia Greco, coordinadora médica para Darfur Central, explica que “el desplazamiento masivo ha acelerado la propagación del sarampión”, dificultando aún más los esfuerzos médicos. Además, obstáculos administrativos y bloqueos frecuentes han causado escasez crítica de vacunas, interrumpiendo programas rutinarios durante meses.
A pesar del inicio reciente de campañas masivas tras meses de negociaciones con autoridades sanitarias y UNICEF, la acción llegó tarde. Recientemente, 55.800 niños fueron vacunados en Forbrenga gracias a una campaña liderada por el Ministerio de Salud con apoyo logístico de MSF. Se prevé que otros 93.000 niños sean inmunizados antes del cierre semanal.
No obstante, la doctora Greco advierte: “Estas campañas son solo un parche ante una herida abierta”. La falta continua de esfuerzos sistemáticos podría llevar a nuevos brotes; recientemente se han reportado 200 casos sospechosos de cólera, sumándose a un importante brote ya existente en otras partes del país.
Es fundamental que las autoridades sanitarias colaboren con organizaciones internacionales para asegurar no solo la vacunación adecuada sino también una respuesta rápida ante futuros brotes epidémicos. Esto incluye garantizar el suministro constante de vacunas sin enfrentar nuevamente los mismos obstáculos logísticos.
Cifra | Descripción |
---|---|
9,950 | Pacientes tratados por sarampión |
2,700 | Pacientes que presentaron complicaciones y requirieron hospitalización |
35 | Muertes registradas por sarampión |
55,800 | Número de niños y niñas vacunados en una campaña reciente |
93,000 | Número esperado de niños y niñas a vacunar en futuras campañas |