En Sudán, la violencia sexual contra mujeres y niñas ha alcanzado niveles alarmantes, con numerosas denuncias de agresiones brutales en público. Médicos Sin Fronteras (MSF) ha alertado sobre la grave crisis humanitaria que enfrentan las supervivientes, quienes a menudo no tienen acceso a atención médica adecuada. Entre enero de 2024 y marzo de 2025, MSF atendió a 659 víctimas de violencia sexual en Darfur Sur, destacando que el 94% eran mujeres y niñas. La organización exige una respuesta urgente para proteger a la población civil y mejorar los servicios médicos disponibles para las sobrevivientes. La situación se complica por el miedo al estigma y la falta de recursos en un contexto de conflicto armado.
La situación de las mujeres y niñas en la región de Darfur, Sudán, es crítica. Médicos Sin Fronteras (MSF) ha emitido una advertencia sobre el uso generalizado de la violencia sexual contra menores, destacando la falta de recursos e instituciones adecuadas para proporcionar asistencia médica y humanitaria a las víctimas.
Las historias que emergen de esta crisis son desgarradoras. Las supervivientes relatan experiencias horribles de violencia brutal y violaciones, tanto en Sudán como en Chad, donde muchas han buscado refugio. La magnitud del sufrimiento es difícil de cuantificar debido a la escasez de servicios y al estigma que enfrentan las víctimas al intentar buscar ayuda.
«Las mujeres y las niñas no se sienten seguras en ningún lugar», afirma Claire San Filippo, coordinadora de emergencias de MSF. «Los ataques ocurren en sus hogares, mientras huyen o incluso cuando realizan tareas cotidianas como buscar comida o leña». Los relatos indican que estos actos violentos suelen ser perpetrados por grupos armados, lo que agrava la sensación de inseguridad entre la población civil.
Un testimonio impactante proviene de una joven de 27 años que describe cómo los agresores atacaron a un grupo de mujeres bajo la custodia de hombres armados. «Siete hombres me violaron. Quería perder la memoria después de aquello», confiesa. Este tipo de violencia no solo afecta físicamente a las víctimas, sino que también deja cicatrices emocionales profundas.
La atención médica para las supervivientes es escasa y debe ampliarse con urgencia. Ruth Kauffman, responsable médica de emergencias de MSF, señala que «el acceso a servicios médicos para quienes sufren violencia sexual es deficiente». Las barreras para acceder a atención adecuada incluyen el costo del transporte y el miedo al estigma social.
A pesar del contexto adverso, MSF ha implementado iniciativas para capacitar a trabajadores comunitarios en Darfur Sur para brindar atención básica y apoyo psicológico a las víctimas. Desde la introducción de este modelo comunitario, se ha observado un aumento significativo en el número de mujeres y adolescentes que buscan atención médica.
Entre enero y marzo de 2025, MSF atendió a 659 supervivientes en Darfur Sur, revelando estadísticas preocupantes: el 86% reportó haber sido violadas, con un 94% siendo mujeres y niñas. Además, más del 50% indicó haber sido agredidas por miembros del ejército o fuerzas policiales.
La situación no es exclusiva de Sudán; también se observa un patrón similar entre los refugiados sudaneses en Chad. En Adré, casi la mitad de las supervivientes atendidas eran menores. Los testimonios recogidos corroboran la gravedad del problema y subrayan la necesidad urgente de intervención humanitaria.
MSF hace un llamado a todas las partes beligerantes para que cesen los ataques sistemáticos contra mujeres y niñas y garanticen su protección conforme al Derecho Internacional Humanitario. Es imperativo ampliar los servicios médicos y humanitarios disponibles para abordar esta crisis humanitaria sin precedentes.
| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 659 | Supervivientes de violencia sexual atendidos por MSF entre enero de 2024 y marzo de 2025. |
| 86% | Porcentaje de supervivientes que declararon haber sido violadas. |
| 94% | Porcentaje de supervivientes que eran mujeres y niñas. |
| 56% | Porcentaje de agresiones realizadas por miembros del ejército, policía u otras fuerzas de seguridad. |
Se denuncia el uso de la violencia sexual contra menores de edad, así como agresiones físicas y violaciones en público, especialmente en la región de Darfur.
Las principales víctimas son mujeres y niñas, aunque también hay hombres y niños en riesgo. Se reporta que un alto porcentaje de los supervivientes atendidos son mujeres y niñas.
MSF está brindando atención médica a las supervivientes de violencia sexual y denunciando la situación para aumentar la conciencia sobre la crisis humanitaria en Sudán. También están formando a trabajadores sanitarios comunitarios para mejorar el acceso a servicios médicos.
Las consecuencias pueden ser físicas y psicológicas, poniendo en peligro la vida de las víctimas. Muchas enfrentan barreras para acceder a atención médica debido al estigma social y el miedo a represalias.
Se pide que cesen los ataques brutales y las violaciones sistemáticas, garantizando la protección de la población civil y respetando el Derecho Internacional Humanitario.