MUNDO INSÓLITO

Carrie y su bebida favorita

Las adicciones más raras del mundo

Viernes 19 de diciembre de 2014
Esta mujer tiene una adicción muy peculiar: Bebe su propia orina.

Si eso no es lo suficientemente desagradable, además la utiliza para bañarse, lavarse los dientes o la cara.

Ella explica que al beber su orina se siente tibia y agradable, y además asegura que padecía cáncer, y este hábito le ha ayudado a vencerlo.

Actualmente lleva más de 5 años haciéndolo y no tiene intención de dejarlo.

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