Tres compañeros de trabajo paseaban por las calas más impresionantes de Palma de Mallorca para hacerse fotografías de tan hermoso lugar. Los tres amigos, jóvenes y atrevidos, se dirigieron a una de las mejores calas de la localidad, la Cala de Mandia, donde dos de ellos no se esperaban su trágico final.
Cuando el compañero de José Luis G.I. y B.E.H.A. se disponía a lanzar la última fotografía, vio como una gran ola arrastraba a sus dos jóvenes compañeros a lo más profundo del mar, y no pudo hacer más que avisar a la policía para intentar rescatarlos.
La Guardia Civil acudió en su búsqueda pocos minutos después de la llamada, pero los cuerpos estaban totalmente desaparecidos y inundados por el mar. La localidad de Manacor se ha volcado con las dos familias de los jóvenes e intentaron ayudar por todos los medios posibles.
Al fin, un buzo aficionado, que colaboraba con la Policía Local, halló el cuerpo sin vida del venezolano José Luis de 20 años a ocho metros de profundidad en la zona en la que desapareció el cuerpo. La Guardia Civil avisó del encuentro del cadáver al Grupo Especial de Actuaciones Subacuáticas (GEAS), los cuales encontraron el segundo cuerpo del colombiano de 23 años a pocos metros de donde se halló el primero.
Las familias de las víctimas, aún shockeadas por el suceso, recibieron los cuerpos de sus familiares, trasladados desde Palma de Mallorca a sus respectivas casas. El trágico accidente tuvo en vilo a la localidad de Manacor, pero todos sus vecinos colaboraron con las autoridades para encontrar los cadáveres.
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